
Este coloso del siglo XVIII fue construido entre 1763 y 1774 al este del puerto de La Habana para apoyar la defensas de la ciudad. En 1762 los británicos habían tomado La Habana al ganar el control de este lugar estratégico importante, y fue de aquí que bombardearon la ciudad sin piedad. Con el fin de evitar esto nuevamente, el rey español Carlos III ordenó la construcción de un fuerte masivo que repelería a los futuros invasores. Con una medida de 700m de extremo a extremo, es la mayor fortaleza colonial española en las Américas. La impregnabilidad del fuerte lo preservó de cualquier ataque, aunque durante el siglo XIX patriotas cubanos se enfrentaron a fusilamientos aquí. Los dictadores Machado y Batista utilizaron la fortaleza como prisión militar e inmediatamente después de la Revolución el Che Guevara estableció su cuartel general dentro de las murallas donde se llevaban a cabo ejecuciones (esta vez de los oficiales de Batista).
En estos días la fortaleza ha sido restaurada para los visitantes, y estos pueden disfrutar de sus atracciones. Además de bares, restaurantes, puestos de souvenirs y una tienda de puros (que contiene el cigarro más largo del mundo), La Cabaña alberga el Museo de Fortificaciones y Armas y el fascinante Museo de la Comandancia del Che. La ceremonia nocturna del cañonazo a las 9pm es una popular excursión por la noche en la que actores vestidos con uniformes militares del siglo XVIII recrean el disparo de un cañón sobre el puerto. Usted puede visitar la ceremonia de forma independiente o como parte de una excursión organizada.